Los esfuerzos por conseguir certificaciones de edificios con criterios de sostenibilidad medioambiental (como LEED) requieren sistemas constructivos y materiales que contribuyan a este esfuerzo por cuidar nuestro entorno. Desde su proceso de fabricación, su mecanismo de instalación y sus características de reducción de la transmisión térmica, así como la posibilidad de reutilización, hacen del sistema de paneles aislantes una alternativa constructiva más eficiente en el uso de los recursos. Descubramos por qué.
CERTIFICACIÓN LEED
En el ámbito de la construcción, ya se trate de estructuras de viviendas como edificios de apartamentos, o de aquellas destinadas a usos productivos como edificios de oficinas, fábricas o instalaciones turísticas, la certificación LEED* es muy valorada y deseada por los propietarios.
LEED consiste en un compendio de normas que debe cumplir un determinado inmueble construido, reconstruido o rehabilitado, para obtener el aval y el respaldo que acredita que el edificio respeta considerablemente el medio ambiente.
Es necesario que los implicados en cada proyecto constructivo decidan si éste se orientará desde su diseño a la obtención de dicha certificación, ya que ello implica considerar todo un conjunto de elementos a articular para cumplir con los requisitos de la autoridad certificadora.
EL SISTEMA DE PANELES AISLADOS PUEDE AYUDAR
En este sentido, la utilización de paneles aislados para muros y cubierta puede ser una solución que permita a un edificio obtener dicha certificación. Es importante dejar claro que, como ya se ha mencionado, esto no dependerá sólo de un determinado material que se utilice, sino de todo el sistema con el que se haya levantado el edificio, por lo que el uso de paneles aislados por sí solo no puede garantizar que lleve a los interesados a obtener realmente la certificación, al igual que ningún otro material podrá hacerlo por sí solo. No obstante, los paneles sándwich pueden ser considerados como una alternativa que se suma a ese conjunto de elementos que conformarán el inmueble y lo llevarán a cumplir con los requisitos verdes.
CRITERIOS LEED
La certificación LEED contempla 6 criterios: sostenibilidad, uso del agua, eficiencia energética, recursos y materiales, ambiente interno y proceso de diseño innovador. En este sentido, el panel aislante es candidato a cumplir al menos tres de ellos.
Sostenibilidad
En cuanto a la sostenibilidad, que a grandes rasgos significa lo reutilizables que pueden ser los materiales, los paneles aislantes son candidatos a ser reciclados. Es una práctica poco común, pero sin duda real y posible. Dado que este producto prefabricado está parcialmente ensamblado con machihembrado, si se desmontan correctamente y con cuidado, pueden volver a utilizarse para el revestimiento de otra estructura si las características técnicas lo permiten (es decir, temperatura, estructura, etc.).
En el caso concreto de espacios interiores, como una oficina dentro de una planta o una cámara frigorífica, esta labor de reutilización puede ser más sencilla, ya que es habitual que estas instalaciones estén formadas por paneles que no están unidos a la estructura principal del edificio, lo que los convierte en un espacio aún más versátil. Si se desea, los paneles pueden desmontarse y colocarse en otro lugar para darle un nuevo uso, por lo que no será necesario demolerlo y destruirlo para luego reconstruirlo con material nuevo como en el caso de las instalaciones realizadas con materiales fijos (bloques de mampostería, por ejemplo).
En consonancia con lo anterior, los residuos de la producción de paneles se pueden aprovechar en la fábrica, ya que la chapa de acero se puede reciclar, mientras que la espuma de poliuretano, ya sea PIR o PUR, se puede incinerar para obtener energía de la combustión. Consumo de energía
En lo que respecta a la eficiencia energética, financiera y operativa, el esfuerzo y la potencia necesarios para la instalación de los paneles aislantes son mínimos. La instalación en la estructura no requiere una gran cantidad de mano de obra ni numerosa maquinaria in situ, por lo que el uso de combustible se reduce drásticamente en comparación con los sistemas de construcción basados en materiales como el cemento, la grava y otros, para los que se necesitan grandes equipos, maquinaria electromecánica y de combustión.
Además, durante el ciclo de vida de este producto, en promedio se ahorran hasta 100 veces la energía utilizada para su producción. Adicionalmente, dadas las propiedades térmicas aportadas por el núcleo de espuma (PUR , PIR o Lana de Roca), proporcionan al edificio la capacidad de mantener una temperatura interna adecuada, recurriendo en menor medida al uso de calefactores o aires acondicionados, lo que conlleva a una disminución en el consumo de energía y combustible.
Ambiente interior
Lo anterior va de la mano con el criterio de las condiciones internas logradas en el edificio, las cuales se aproximarán a las óptimas ya que los paneles proporcionan a los usuarios del inmueble -llámense trabajadores, oficinistas, turistas, comensales o residentes- un ambiente agradable sin el uso de recursos de refrigeración o calefacción. Además, los paneles aislantes impiden la acumulación de humedad, evitando así la proliferación de moho, hongos o bacterias.
PARA CONCLUIR
Como vemos, a pesar de la primera impresión que pueda dar a algunos, al tratarse de un producto de acero, los paneles aislantes son una alternativa a tener en cuenta a la hora de obtener la certificación LEED, o simplemente para la construcción de edificios que aunque no busquen obtener el certificado, el gestor quiera una alternativa ecológica, eficiente, que ahorre tiempo y además sea duradera.
- Leadership in Energy and Environmental Design del US Green Building Council